El papá del Checo Pérez, fue hospitalizado de emergencia el pasado 15 de septiembre tras sufrir un preinfarto. Se presume que el incidente pudo ser provocado por el impacto emocional del accidente que su hijo sufrió en el Gran Premio de Azerbaiyán.
Tras el accidente, donde Carlos Sainz colisionó con Checo, Antonio Pérez fue encontrado inconsciente en su domicilio y fue trasladado inmediatamente a un hospital en la Ciudad de México. Actualmente, se encuentra estable, pero sigue en terapia intensiva y bajo una estricta vigilancia médica.
Según un comunicado emitido por la ScuderíaPérez, su estado de salud se está monitoreando de forma exhaustiva, con especial atención en su corazón y otros órganos vitales. Se ha informado que, aunque su situación es delicada, la intervención rápida de la Cruz Roja Mexicana fue crucial para salvar su vida. El equipo médico sigue evaluando su evolución, y permanecerá hospitalizado durante algunos días más.
El preinfarto que sufrió Antonio Pérez Garibay ocurrió poco después del accidente de su hijo en Bakú, Azerbaiyán. Durante el Gran Premio, Checo Pérez competía por el tercer lugar cuando Carlos Sainz lo chocó, arruinando su participación en la carrera.
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La situación médica de Antonio Pérez Garibay está siendo atendida de manera profesional, con la esperanza de que su estado siga mejorando. Mientras tanto, Checo Pérez cuenta con el apoyo de su equipo y de los fans, quienes esperan una pronta recuperación para su padre.