El Comité Ejecutivo Estatal de Morena en Baja California confirmó el fallecimiento de Irma Andazola Gómez, candidata a diputada federal por el 4° Distrito de Baja California. La noticia fue anunciada por Catalino Zavala, presidente del Comité Ejecutivo Estatal del partido, a través de un comunicado oficial. Andazola, de 59 años, falleció el 23 de mayo, pero su equipo de campaña continuó con sus actividades sin notificar su deceso hasta la víspera de las elecciones del 2 de junio.
El medio local Brújula News reveló la muerte de Andazola y cuestionó la decisión del equipo de campaña de no informar sobre este hecho ni al partido ni a los simpatizantes de la candidata. Según informes, el esposo de la candidata solicitó mantener en secreto su fallecimiento para evitar la designación de un suplente antes de las elecciones. El motivo detrás de esta decisión sería asegurar que su nuera, Adriana del Pilar Reyes García, pudiera asumir el cargo en caso de resultar electa. El equipo continuó con publicaciones en la página oficial de Andazola y distribuyó propaganda como si nada hubiera ocurrido.
La confirmación de la muerte de Irma Andazola ha generado diversas reacciones. La gobernadora de Baja California, Marina del Pilar, expresó su pesar destacando sus cualidades personales y profesionales. Marco Blásquez, candidato a presidente municipal de Tijuana por el PT, lamentó tanto el fallecimiento como el “turbio silencio” que rodeó la noticia. Medios locales reportaron que Irma Andazola murió debido a un tumor maligno e hipertensión arterial en la Torre Médica del Hotel Quartz, y sus restos fueron cremados.
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La muerte de Irma Andazola y la decisión de su equipo de campaña de continuar sin informar su deceso hasta poco antes de las elecciones han causado conmoción. En especial en el ámbito político. Este caso plantea serias preguntas sobre las decisiones tomadas en contextos de incertidumbre política.