San Mateo Atenco, un municipio del Estado de México, ha enfrentado históricamente desafíos significativos debido a las lluvias torrenciales que provocan inundaciones y encharcamientos. La acumulación de aguas pluviales y fluviales afecta gravemente a las comunidades, dañando propiedades y poniendo en riesgo la seguridad de los habitantes. Ante este escenario, la presidenta municipal Ana Muñiz Neyra ha encabezado un ambicioso plan de fortalecimiento de la infraestructura hidráulica para minimizar los impactos de las lluvias.
San Mateo Atenco se encuentra en una región que, debido a sus características topográficas, es especialmente vulnerable a las inundaciones durante la temporada de lluvias. Este problema se ve agravado por el crecimiento urbano y la insuficiente capacidad de drenaje en algunas áreas. La acumulación de agua, producto de lluvias atípicas e intensas, no solo afecta la movilidad en la región, sino que también pone en riesgo la integridad de las viviendas y las vidas de sus residentes.
La administración municipal, consciente de estos riesgos, ha adoptado un enfoque preventivo y reactivo para gestionar las aguas pluviales y fluviales. Este enfoque incluye desde la modernización de la infraestructura existente hasta la implementación de protocolos de emergencia para garantizar una respuesta rápida y eficiente ante cualquier eventualidad.
El gobierno de San Mateo Atenco ha puesto en marcha una serie de acciones clave para mejorar la infraestructura hidráulica del municipio. Una de las intervenciones más importantes ha sido la limpieza y desazolve del río Lerma, un cuerpo de agua fundamental para la gestión de las aguas pluviales. Se han intervenido 7.4 kilómetros del río, lo que ha permitido un flujo más eficiente del agua y ha reducido significativamente el riesgo de desbordamientos.
Además, se ha priorizado el mantenimiento continuo de la infraestructura de drenaje en todo el municipio. Este mantenimiento incluye la revisión periódica y el desazolve de canales y alcantarillas, lo que asegura que estén en condiciones óptimas para manejar grandes volúmenes de agua. Estas acciones han sido esenciales para prevenir inundaciones y garantizar que las vías principales y zonas residenciales se mantengan transitables durante las lluvias.
La presidenta municipal Ana Muñiz Neyra también ha promovido la implementación del Protocolo de Prevención, Reacción y Atención Inmediata a la Población, una estrategia integral que permite una respuesta coordinada y eficiente ante emergencias relacionadas con el agua. Este protocolo incluye medidas preventivas, como la difusión de alertas tempranas y la preparación de equipos de emergencia, así como acciones de respuesta rápida para mitigar los impactos de cualquier eventualidad.
Gracias a las medidas implementadas, San Mateo Atenco ha logrado reducir significativamente las afectaciones causadas por las lluvias en los últimos años. Las inundaciones, que en el pasado eran una constante amenaza, han disminuido tanto en frecuencia como en severidad. Los habitantes del municipio han notado una mejora en la respuesta de las autoridades ante eventos climáticos extremos, lo que ha generado una mayor confianza en la gestión municipal.
De cara al futuro, la presidenta Ana Muñiz Neyra ha manifestado su compromiso de seguir invirtiendo en la infraestructura hidráulica del municipio. El objetivo es consolidar a San Mateo Atenco como un lugar seguro y resiliente, capaz de enfrentar los desafíos climáticos que puedan surgir. Se prevé la continuidad de las acciones de mantenimiento y la ejecución de nuevos proyectos que refuercen aún más la capacidad de respuesta del municipio ante las lluvias intensas.